miércoles, 17 de abril de 2013

Murió el creador del sintetizador

Robert “Bob” Moog murió el último domingo a los 71 años en su casa de Asheville, Carolina del Norte, a causa de un cáncer de cerebro que se le había diagnosticado en abril de 2005.
El padre del sintetizador nació en Nueva York en 1934 y se recibió de ingeniero físico. De niño construía theremins con su padre y desde muy joven empezó a experimentar con instrumentos electrónicos.
En 1963 tuvo un encuentro casual con el profesor de música y compositor experimental Herbert Deutsch, cuya búsqueda para sonidos electrónicos inspiró a Moog a crear el Primer Sintetizador Modular Moog. 
A Moog se le ocurrió apartar los theremins y los amplificadores portátiles de guitarra para darle a los osciladores electrónicos un destino musical, luego trabajó hasta conseguir la unión de varios circuitos, un par de osciladores, amplificadores y un modulador. Lo original del diseño fue que Moog usó el control de la tensión para variar el tono del oscilador o el volumen del amplificador.
En octubre de 1964, Moog pudo mostrar su prototipo en la Convención de Audio de la Sociedad de Ingeniería y allí recibió los primeros pedidos. Al tiempo se encontraba metido en el negocio de la fabricación de sintetizadores, pero la mayoría de las entregas tenían como destinatarios a las universidades, academias y músicos experimentales.
La explosión de los sintetizadores llegó de la mano de un joven compositor llamado Walter Carlos, quien se puso a grabar versiones electrónicas de piezas clásicas de Johann Sebastian Bach. Más tarde las volcó en el álbum Switched on Bach de 1968 que fue un éxito masivo, vendió más de un millón de copias, se mantuvo en las listas de Billboard durante cinco años, y le dio a Carlos tres Grammys.
Lo más importante fue que se creó una gran demanda de sintetizadores y fue así como el Sintetizador Moog salió del ámbito académico para ganar masividad.
Aun mayor éxito tuvo el Minimoog® lanzado a finales 1970, un sintetizador de interpretación compacto basado en la tecnología de productos modulares Moog, más económico y transportable, que es hoy una joya de coleccionistas conocido como el “Santo Grial de los sintetizadores”. 
Moog participó en el disco Abbey Road de los Beatles y de la película La naranja mecánica de Stanley Kubrick. Bandas como Genesis, U2 y The Police usaron su sintetizador, el que también fue convertido en instrumento de culto por Pink Floyd y Kraftwerk.

Publicado en www.tsiul.com en agosto de 2005.

Sentidos

Berni
Correlatos 
En el aniversario del centenario de Berni, esta muestra reúne cincuenta de sus obras con otras cincuenta de artistas argentinos.
El objetivo de la exposición es poner de manifiesto un diálogo entre Berni y sus contemporáneos durante los sesenta años de su trayectoria.
Hasta el 16 de mayo en el Malba. Figueroa Alcorta 3415. De jueves a lunes de 12 a 20, los miércoles hasta las 21. La entrada general es de $ 7, para docentes y mayores de 65 años cuesta $ 3,50 y los estudiantes, jubilados y menores de 12 años entran gratis. Los miércoles es libre y gratuita. 

Pérez Celi
Xentenario 
La exposición cuenta con 30 obras de gran tamaño, algunas realizadas por el artista durante estos últimos años y otras especialmente dedicadas para esta exposición, como por ejemplo un retrato de Benito Quinquela Martín, a quien Pérez Celis admira.
La muestra forma parte de las celebraciones del centenario de la fundación del club de fútbol Boca Juniors, en cuyo estadio Pérez Celis pintó un gigantesco mural, años atrás.
Hasta el 1º de mayo en el Museo Benito Quinquela Martín. Pedro de Mendoza 1835. De martes a domingos de 10 a 18. Bono Contribución: $ 1.

Publicado en Cartas para Luciano en mayo de 2005.

lunes, 15 de abril de 2013

Mujeres soñadoras

Un fantástico recorrido por los fotomontajes de Grete Stern se puede ver hasta el 25 de enero en el Centro Cultural Recoleta. La muestra Sueños recoge en edición facsimilar las imágenes que la genial fotógrafa alemana –radicada en Argentina- ilustró para el correo de lectoras de una revista femenina entre 1948 y 1952.
La publicación, Idilio, introdujo dos novedades para la época: las fotonovelas y la sección “El psicoanálisis le ayudará”. En esta parte, las lectoras enviaban sus sueños para su interpretación psicoanalítica que Stern era la encargada de ilustrar.
Las consultas -de riqueza, glamour y centralmente de amor-, fueron un disparador ideal para que la fotógrafa mostrara la sumisión en la que se encontraba la mujer en esa época. A través del mensaje icónico, universal y profundo de los sueños, Stern se centró en el universo femenino y ahondó en las causas del sometimiento con un enfoque nada compasivo y un tanto irónico.
Vanguardista en el plano artístico, la fotógrafa también lo fue en el estilo de vida que llevó. Como una más de las mujeres de estos tiempos, además de ser una profesional, se dedicó a las tareas del hogar. Los fotomontajes para Idilio los realizaba en su propia casa de una semana para la otra, utilizando como modelos a su hija y a su empleada doméstica, a los que sumaba objetos hogareños como su palangana y su tabla de lavar la ropa, y complementaba con material de su propio archivo.
Stern se formó artísticamente en Alemania. Estudió diseño gráfico en la Escuela de Artes Aplicadas de Stuttgard y más tarde tomó cursos de fotografía en la célebre escuela Bauhaus de Berlín. Cuando emigró a Buenos Aires en 1936 huyendo del nazismo, junto a su marido Horacio Coppola, poco pudo desarrollar aquí sus conocimientos en técnicas mixtas.
Con su esposo, también fotógrafo, instaló un estudio de diseño y publicidad que fracasó, ya que se adelantó a las necesidades del mercado local. De todos modos, la casa que compartieron en Ramos Mejía fue centro de reunión de psicólogos, escritores, arquitectos, actores y artistas plásticos que contribuyó a cimentar las bases de la fotografía moderna.

Diciembre de 2003.